Estamos en el último trimestre del año y es ahora cuando debemos preparar la factura fiscal que queremos pagar el próximo año. Todos hemos oído hablar de los planes de pensiones, son esos productos que todos los bancos ofrecen en sus escaparates en plenas navidades y que comparten cartel con los anuncios de perfumes, turrones y el ya desaparecido calvo del sorteo de navidad.
Un plan de pensiones es sencillamente un producto de ahorro por el cual tu le das dinero al banco para que te lo guarde y lo gestione hasta el momento en que necesites el dinero, si todo va bien ese momento llegará el día de tu jubilación (aunque puedes recuperarlo antes en caso de estar parado, discapacidad… lagarto lagarto)
El Estado quiere potenciar el ahorro en este tipo de productos premiándolos con una deducción fiscal.
Cuanto me ahorro si meto dinero en un plan de pensiones?
El hecho de meter dinero en un plan de pensiones equivale a decir que todo ese dinero no lo has ganado y por lo tanto no tienes que pagar ni un duro de impuestos.
Un ejemplo: Siendo un poco burros si tu sueldo es de 120.000 euros brutos y por ejemplo te tocaría cobrar 10.000 euros mensuales menos la retención que pongamos son 2.000 euros, es decir, que tú cada mes vas a cobrar 8.000 euros netos. Pues bien, llega diciembre y después de comerte los langostinos con la suegra decides meter dinero en un plan de pensiones y como vives del aire quieres meter todo tu sueldo en el plan de pensiones, los 120.000 euros (aunque sólo hayas cobrado 8.000x12 meses).
Pues bien, el hecho de meter los 120.000 euros en el plan de pensiones, a efectos de hacienda quiere decir que tu sueldo ese año ha sido de cero euros ya que has cobrado 120.000 y has metido todo en el plan de pensiones, por lo tanto cuando hagas la declaración de renta hacienda te devolverá todo lo que te ha retenido, es decir, los 2.000 euros mensuales que hemos comentado al principio y por lo tanto ingresarás de golpe 24.000 euros.
Ésta es la ventaja fiscal de los planes de pensiones pero con limitaciones: hacienda lógicamente no te deja meter todo tu sueldo porque no se fía de que realmente tengas otros ingresos en negro por ahí (sospecha que puedas hacer de mimo en las ramblas el fin de semana)
La limitación es que tú puedes meter todo el dinero que quieras en el plan de pensiones, pero sólo te podrás desgravar la menor de estas dos cantidades:
- El 30% de tu sueldo bruto (50% si eres mayor de 50 años)
- Un máximo de 10.000 euros ( 12.500 euros si eres mayor de 50 años)
Para que estiméis el impacto que esto puede tener en vuestra economía doméstica os pongo un ejemplo más realista. Una persona que cobre 30.000 euros brutos anuales (que equivale a un sueldo mensual de 14 pagas de unos 1.550 euros) si aportase el máximo permitido (en este caso el 30% de 30.000 euros son 9.000) tendría un ahorro fiscal de 2.520 euros. Si el sueldo fuese de 60.000 euros brutos el ahorro fiscal para esos mismos 9.000 euros (aunque podría llegar a los 10.000 ya que el 30% ahora es superior) sería de 3.178 euros
Es decir, para los mismos 9.000 euros una persona que cobra el doble que la otra se ahorra mucho más en su factura fiscal. Esto es debido a que cuanto mas cobras mayor es el % de IRPF que pagas y por el mismo motivo ese mayor % de IRPF hace que también te ahorres más.
No está mal que en Junio hacienda te devuelva 2.000 euros para las vacaciones, eh?
Lógicamente hay que tener en cuenta que esos 9.000 euros van a estar ahorrados hasta que te jubiles por lo que el día que te quieras comprar ese apartamento en Torrevieja no podrás disponer de este dinero por lo que sólo se debe aportar al plan de pensiones dinero que se quiera ahorrar para la jubilación por muy golosa que pueda parecer la deducción fiscal.
Y digo parecer porque es demasiado bonito para ser verdad
Hasta aquí la cara de los planes de pensiones, pero falta la cruz: el momento de recuperar los ahorros. Ya sé que pasar el día analizando la evolución de las obras del barrio resulta barato, pero a todo el mundo le duele pagar impuestos.
Y en este momento Hacienda nos reclama lo que nos hemos ahorrado unos años antes y nos dice: “Si no pagaste hace unos años por este dinero que habías ganado ahora sí que lo vas a pagar” Es decir, que cuando llegue el momento de cobrar el dinero deberemos rendir cuentas con Hacienda y pagar impuestos.
Lógicamente la pregunta es cuantos impuestos?
Pues dependerá de cómo rescates tu plan de pensiones: hay 3 modos capital, renta y mixto.
Capital: todo a toca teja
Renta: en cómodos plazos
Mixto: una parte a toca teja y otra en cómodos plazos
Todo lo que recibas de tu plan de pensiones será considerado como “Rentas del trabajo” y por lo tanto tributarán del mismo modo. Veamos un ejemplo para una persona que haya ahorrado 150.000 euros:
Opción Capital: Si la persona decide cobrarlo todo a toca teja, hacienda le pedirá que pague los mismos impuestos que pagaría un directivo que cobrase 150.000 euros anuales, usease un 29%. Lo que equivale a pagarle de golpe al fisco la friolera de 43.500 euros. Eso es un palo y lo demás son tonterías. Ahora es el momento de acordarte de todos esos caprichos que te permitiste año a año con el supuesto ahorro fiscal que te proporcionaba aportar al plan de pensiones.
Nota: para las aportaciones a los planes de pensiones anteriores al 2007 existe una reducción del 40% para el caso en que se cobre en forma de capital.
Opción renta: Pongamos que la persona decide repartirlo en el tiempo y cobrar durante 10 años una renta anual de 15.000 euros. En este caso pagará anualmente impuestos equivalentes a un sueldo de 15.000 euros, esto equivale al 14% y la cifra de 2.100 euros mensuales, es decir, 21.000 euros. De esta forma hacienda se queda con menos de la mitad de lo que hubieses pagado si lo hubieses cobrado de golpe.
Opción mixta: Un término medio sería cobrar de golpe 50.000 euros por los que pagaríamos un 25%, es decir, 12.600 euros y además durante 10 años unos 10.000 euros más anualmente por los que tributaríamos un 10%, usease 1.000 euros anuales y 10.000 euros en total. La suma de las dos cantidades nos da 22.600 euros de impuestos, cifra que se encuentra en medio de las dos cifras anteriores.
Otro factor importante a tener en cuenta: lo último que quiero es que el banco se quede con mi dinero si me pasa algo.
Esto es un mito y es uno de los principales motivos por el cual la gente escoge cobrar todo el dinero de golpe cuanto se jubilan y pagar un pastón a Hacienda en concepto de impuestos. Si en el caso de la renta anual de 15.000 euros anterior la persona tiene la desgracia de fallecer antes de los 10 años (lagarto lagarto, toquemos madera etc etc) todo aquello que la persona no haya cobrado pasará a sus herederos.
Sólo existe una modalidad denominada Renta vitalicia en la que el banco se podría llegar a quedar con tu dinero, aunque tampoco es del todo cierto. Esta modalidad consiste en lo siguiente:
Tú llegas a tu jubilación con un plan de pensiones valorado en 150.000 euros y lo que quieres es cobrar una renta para el resto de tu vida. Entonces el banco estima que te queda de vida 15 años y te ofrece una renta vitalicia de 10.000 euros anuales. En el momento que tu aceptas tu ya no tienes 150.000 euros, tu ahora lo que tienes es la seguridad de que aunque vivas más que Matusalén tú cobrarás cada año 10.000 euros anuales.
Por eso, si desgraciadamente falleces al cabo de poco tiempo el banco no “se ha quedado con tu dinero” ya que tú a ese dinero has renunciado a cambio de tu Renta vitalicia.
Para rizar el rizo a esta renta vitalicia se le puede añadir un seguro de vida por el cual si falleces pronto los herederos cobren un seguro ya que inicialmente tus ahorros eran de 150.000 euros y sólo has durado dos telediarios.
Al final el modo de rescatar el dinero depende de la fiscalidad que quieras asumir pero sobretodo de tu estilo y esperanza de vida.
Tipos de planes de pensiones
Hemos dicho que el dinero que tu metes en un plan de inversiones el banco lo acaba gestionando, es decir, invirtiéndolo en bolsa, renta fija, etc etc en función del perfil de riesgo del cliente estos fondos de pensiones serán más o menos agresivos. Lo que se suele hacer es al principio ser más agresivo buscando más rentabilidad ya que tus ahorros depositados en el plan de pensiones son menores y aún eres joven. Y a menudo que te haces mayor pasarlo a fondos más seguros ya que lo que te interesa es mantener tus ahorros y no jugártela a la ruleta rusa.
Mi recomendación es que si eres menor de 35 años yo ni me plantearía aportar nada a un plan de pensiones por el momento.
Como habéis visto las ventajas fiscales de los planes de pensiones son del tipo Pan para hoy y hambre para mañana. En función del momento de tu vida en que prefieras comerte el pan los planes de pensiones pueden ser o no un buen producto de ahorro.
La dudosa ventaja fiscal de este producto hace tiempo que ha abierto el debate sobre si el Estado debería hacerlos más atractivos fiscalmente y de este modo fomentar de verdad el ahorro en las familias ya que tal y como está el patio es dudoso que los que nos jubilemos de aquí a 30 años nos quede algo de pensión pública, por lo que se debería fomentar el ahorro privado con mejores ventajas fiscales.
Espero que este post os haya aclarado un poco el tema de los planes de pensiones, las aportaciones, el rescate y las ventajas fiscales que tienen los planes de pensiones. Ahora ya podéis incluso asesorar a vuestros conocidos.
Para cualquier duda estoy a vuestra disposición en pdpandereta@gmail.com
1 comentarios:
Me ha gustado mucho este artículo. Escribes muy bien, se entiende todo perfectamente. Además planeas varios escenarios con ejemplos, lo que lo hace aún más claro para los de economía no sabemos demasiado.
Un saludo
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